Llega a casa y tras cerrar la puerta cumple, con cierto abandono, con los pequeños rituales que le llevan a sentirse un poco a salvo, protegido, no sabe bien por qué, o de quién o qué cosa. Termina pronto y recorre su pequeño piso, a menudo inmenso, buscando a su mujer a quién no llama... Leer más →
Debe estar conectado para enviar un comentario.